¡El fin de todo! Un personaje clave toma una decisión que cambiará la mansión para siempre

La Promesa inicia una nueva fase en La 1 tras la boda de Manuel y Jana, un evento que marcará el comienzo de intensas tramas en las que el pasado cobrará un papel crucial.

La sabiduría popular dice “Si no puedes con tu enemigo, únete a él”, y parece que Cruz ha decidido seguir este consejo en sus últimas horas en La Promesa… aunque más por obligación que por deseo.

Esta vez, Jana toma la delantera y la Marquesa parece dar por perdida la batalla en cuanto a la boda de su hijo con la ex doncella. Sin embargo, en lugar de rendirse, decide involucrarse activamente en los preparativos.

La boda de Manuel, el heredero de los Marqueses de Luján, no puede ser un evento cualquiera. Cruz se encargará de hacer todo lo posible para que nadie cuestione el origen de la futura esposa de Manuel.

Pero sus manipulaciones empiezan a hartar más a Manuel que a Jana. Mientras ella acepta todas las decisiones de Cruz para mantener la “paz” en la celebración, Manuel cada vez soporta menos los caprichos de su madre y llega a plantearse huir con Jana a un lugar lejano, una idea que Curro apoya de inmediato.

Una de las últimas exigencias de la Marquesa es que Lorenzo acompañe a Jana al altar, cuando ella había pensado en Rómulo. Esta decisión causa gran sorpresa entre los tres involucrados, especialmente dada la tensa relación entre Jana y el capitán. Todos se oponen a la idea, pero es Lorenzo quien más firme se muestra, negándose a ser el padrino de la boda. Alonso se encargará de poner a su cuñado en su lugar.

Otro de los caprichos de Cruz será la elección del vestido de novia. Mientras Jana esperaba usar un regalo de Manuel, la Marquesa tiene otros planes para ella, y la joven se verá obligada a ceder.

Teresa y Vera, por su parte, comienzan a hacer sus propias suposiciones sobre los secretos que podrían esconderse detrás de una pared hueca en el palacio, pensando que podría haber un pasadizo secreto. Las doncellas sueñan con los secretos que podrían descubrir, mientras Lope y Marcelo las escuchan divertidos.

María Fernández no puede olvidar a Samuel y se las ingenia para estar cerca de él, a pesar de las objeciones del cura. Curro, por su parte, sigue buscando a Martina con la esperanza de que llegue a tiempo para la boda. Sin embargo, ella le revela que está en Santander con su amiga Piluca, lo que hace imposible su presencia en el enlace.

A pesar de los esfuerzos de Cruz para que la boda se celebre como ella quiere, no deja de maquinar con la esperanza de impedirla, pero alguien la sorprenderá. Leocadia la escucha mientras habla por teléfono y, aunque Cruz asegura que está avisando a los invitados, su amiga sospecha que está propagando rumores falsos sobre el origen de la novia.

Manuel y Jana, abrumados por las exigencias de Cruz, se sienten cada vez más tristes y cansados, cuando deberían estar disfrutando de su próxima boda. Leocadia, tratando de ser el apoyo de Jana dentro de La Promesa, le aconseja que no se enfoque en los pequeños detalles, sino en lo importante: convertirse en la esposa del hombre al que ama.

Mientras tanto, Cruz sigue tocando puertas en el palacio, acercándose a Catalina, quien le confiesa que también fue madre soltera y que comprende su situación. Catalina le ofrece su apoyo, pero Jana, decidida, le confirma a Manuel que tiene planes de marcharse del palacio después de la boda para ocultar su embarazo.

La Promesa inicia una nueva fase en La 1 tras la boda de Manuel y Jana, un evento que marcará el comienzo de intensas tramas en las que el pasado cobrará un papel crucial. La sabiduría popular dice “Si no puedes con tu enemigo, únete a él”, y parece que Cruz ha decidido seguir este consejo…